Alissa Hawkind.


Draco POV.

Jodidas hormonas.
Si, definitivamente esa era la única explicación a su comportamiento porque de que otra manera estaría viendo a Hermione Granger con esa cara de embobado?
Sacudió la cabeza con una expresión de perplejidad, mientras Pansy lo miraba con una expresión curiosa en su cara, como si supiera lo que estuviera pensando.
-Draco, que te pasa? -le preguntó ella mientras él le devolvía la mirada con el entrecejo fruncido.
-No me pasa absolutamente nada, Pansy. Déjame en paz.- replicó Draco, molesto de repente.
-No es necesario que me contestes así, Draco.-dijo ella fríamente mientras se alejaba.
-Pansy, disculpa es que tengo la cabeza en otro sitio...-dijo él, y dejó que su voz cayera a algo menos que un susurro cuando se dio cuenta de las palabras que había dicho.
Ella lo miró fijamente con una ceja alzada en señal de pregunta.
Un Malfoy, disculpándose? Mejor dicho, Draco Malfoy, disculpándose? Eso era algo que no se veía todos los días.
-Draco, se puede saber qué te pasa?
-Nada Pansy, absolutamente nada.-dijo con aire distraído mientras la imagen de cierta chica de cabellos enmarañados se colaba en su mente.

Clase de Pociones, Viernes 5 pm.

Hermione POV.

Se dirigía a clase de Pociones, afortunadamente la última clase de ese día, se notaba un poco cansada y el hecho de que Pociones con Snape fuera la última clase del día (y de la semana) no mejoraba en nada su perspectiva de cansancio.
Hizo la habitual fila frente al aula de Pociones, en el medio de sus dos mejores amigos, Harry y Ron, pensar en ellos siempre la hacía sonreír, era muy afortunada de tener unos amigos como ellos aunque a veces la sacaran de sus casillas, recordó los momentos que había pasado en compañía de ellos y una pequeña carcajada se escapó de entre sus labios, lo que provocó que Harry y Ron la vieran interrogativamente. Ella solo negó con la cabeza, mientras les sonreía sin percatarse de que cierto rubio de ojos grises la observaba atentamente, con una curiosa expresión en su rostro.

Pansy POV.

“Un momento… Será verdad lo que ven mis ojos? Draco mirando a Granger? Y de esa manera? Mmm, aquí hay algo, gato encerrado, y si… No, no lo creo, Draco no sería capaz! Aunque, pensándolo bien, es la única explicación lógica al comportamiento de Draco de los últimos días…Le daré un empujoncito a mi amigo, tiene que darse cuenta!” Pensaba mientras sonreía, preguntándose cuando sería el momento indicado.


Draco POV.

Ver esa sonrisa en el rostro de ella lo hizo pensar que su sonrisa era la más hermosa que habia visto en su vida y su risa, oh su risa! parecía el tañir de las campanas en verano...pero qué demonios estaba diciendo? que eran toda esa clase de cursilerías que pasaban por su mente al mirar a esa...a esa...perfecto, ahora ni siquiera podía ni pensar en el insulto que le había dicho a ella a lo largo de la vida de ambos, desde que se habían conocido...ambos, que bonito sonaba..."Deja de pensar tonterías, Draco, tu y ella son enemigos y no hay nada que pueda cambiarlo" se reprendió mentalmente mientras a su cara asomaba una mueca de insatisfacción. Pansy le observaba atentamente, notando todos tus cambios de humor y hacia donde se dirigían inconscientemente sus miradas, sonrió dándose cuenta de lo que le pasaba a su amigo.
Hora de entrar al aula de pociones, soltando un suspiro de aburrimiento, Draco entró a la mazmorra, seguido de los demás Slytherins y algunos Gryffindors rezagados. La clase dió comienzo casi inmediatamente, y Snape habló:
-Hoy trabajaremos por parejas.-dijo con su conocidamente amarga voz carente de emoción-Weasley, haga el favor de ponerse con la señorita Parkinson...
Ver la cara que puso Pansy ante la mención de su nombre junto al de la Comadreja fue impagable, este abrió la boca para lanzarle una réplica al profesor, pero este dijo:
-Y no quiero quejas, Weasley, vaya con Parkinson.
Pansy apretó los dientes de pura rabia contenida, mientras la comadreja recogía sus cosas y se colocaba en el asiento vacío al lado de Pansy, esta se había movido rápidamente a otra mesa y evitaba por todos los medios ver la cara de Weasley, alzaba la barbilla dignamente mientras Draco soltaba risitas entre sus dientes al ver la incomodidad de su amiga.
-Potter, con Nott.
Ambos apretaron los labios y fruncían el entrecejo, no se dirigieron la palabra.
-Granger...con Malfoy.
Al instante la sonrisa de Draco cayo y fue sustituída por un gruñido, ella no dijo nada mientras se dirigía a la mesa que debían compartir, se sentó tranquilamente a su lado, sin dar muestras de incomodidad ante el hecho de que le tocaba hacer pareja con Draco Malfoy, mas bien aparentaba que le parecía divertido.
Luego de que todas las parejas hubieron sido asignadas, Snape les ordenó que empezaran a trabajar en la Poción Veritaserum, las manos de Hermione se movían con experiencia, cortando los ingredientes necesarios para la poción y checando pocas veces su libro de pociones para ver las instrucciones, él, como no quería quedarse atrás, puso manos a la obra. Pasaron varios minutos trabajando en silencio, hasta que una risita proveniente del asiento a su lado, lo hizo voltearse a la fuente del ruido. Para su gran sorpresa, ella estaba soltando pequeñas risitas mientras cortaba los últimos ingredientes de la poción.
-Se puede saber qué es lo que te parece tan divertido, Granger?-pregunto Draco mirándola, perplejo.
-Nada, Malfoy -hizo énfasis en su apellido, sonriendo- sólo me parece divertido el hecho de que llevamos poco menos de 10 minutos aquí y tú ni siquiera te has molestado en insultarme.
-Y acaso prefieres que te insulte? -preguntó, viéndola fijamente, dirigiendo su vista a los labios "Concéntrate!" se reprendió mentalmente y la miró de nuevo a los ojos.
-Por supuesto que no.-dijo ella riendo.
-Entonces?
Ella no le respondió, solo se rio y empezó a tararear una canción desconocida para él. Siguieron trabajando en silencio mientras Malfoy le dirigía ocasionales miradas sin que ella se diera cuenta, miró, por ejemplo, que debajo de su uniforme se le marcaban unas pequeñas curvas, poco notables gracias a los uniformes anchos del colegio, pero que aun así estaban allí, Malfoy estaba poco menos que sorprendido por ese descubrimiento.
La campana sonó, dándole fin a la clase, y encima del barullo que provocaban todos, se escuchó la voz de Snape diciendo:
-Para la próxima clase quiero un pergamino entero con todo lo referente al Veritaserum.
Hermione miro a Draco después de recoger sus cosas y le dijo:
-Nos vemos en la Biblioteca a las 7:30, Draco.-le susurro Hermione sonriente, mientras él la miraba, estupefacto.
-Con que motivo?
-El trabajo de Pociones.-contestó ella de forma inocente, mientras se reunía con sus amigos, Potty y la Comadreja, como él los llamaba.
Draco salió del aula, siendo alcanzado por Pansy rápidamente.
-Que te dijo Granger hace un momento?
-Que nos encontráramos en la Biblioteca a las 7:30.
Ella solo le miró y esbozó una amplia sonrisa.

Biblioteca, 7:29 pm.

Draco POV.

Draco ya se encontraba en la biblioteca pensando en las palabras de despedida que le había dirigido Pansy:

FLASHBACK
“-Draco, tienes que contarme absolutamente todo, con lujo de detalles, si no, no te lo perdonaré.
-Pero que se supone que te voy a contar, Pansy? Solo vamos a hacer el trabajo de Pociones.
-Si claro el trabajo de Pociones.-dijo ella mientras lo apuraba diciéndole que se le iba a hacer tarde.
FIN FLASHBACK.

Así que allí se encontraba el, esperándole a ella, que cosas no? Él, Draco Malfoy esperándola a ella, Hermione Granger.
Se estaba empezando a impacientar, cuando a los pocos segundos escuchó unos pasos acercándose a él, era ella, que lucía su característica sonrisa, solo que esta vez era diferente...esta vez iba dirigida a él.
-Buenas noches, Draco.
-Buenas noches, Her...Un momento, desde cuando hay tanta confianza entre nosotros para que me llames Draco?
-Ese es tu nombre no?-dijo ella alzando una ceja.
-Sí, es mi nombre pero...
-Pero nada.-lo calló, con una sonrisa en sus labios, sonrisa que lo dejo embobado viendo como las comisuras de sus labios se arqueaban hacia arriba formando esa sonrisa tan perfecta.
-Entonces empezamos o no?-dijo ella mientras el carraspeaba y sacudía la cabeza de un lado a otro, reprimiendo el impulso que sentía de ir hacia ella y plantarle un beso para nada casto en los labios.
"Pero qué demonios se supone que estoy diciendo? Ni siquiera debería pensarlo!" se reprendió mentalmente, mientras ella lo observaba divertida y sacaba pluma y pergamino para empezar a trabajar.
A los pocos minutos de trabajar en silencio, la tinta se le acabo a Draco, su otro frasco estaba lejos del alcance de su mano, por lo que dijo, distraído:
-Me pasas ese frasco de tinta, Hermione?
-Por supuesto, Draco.
Ella le paso el frasco de tinta sonriente, mientras él se daba cuenta de que la habia llamado por su nombre de pila. Mas eso no le disgustaba en lo absoluto, más bien le gustaba que él la hubiera llamado por su nombre mientras que para él, escuchar su nombre pronunciado de los labios de ella era como una caricia para sus oídos.
Se miraron por un largo momento, el miraba el intenso marrón de los ojos de ella, marrón que denotaba calor mientras ella miraba sus ojos grises que no parecían fríos en lo absoluto. Vió como la mirada de él se detenía en sus labios y sonrió.
-Oh, qué demonios!-expreso Draco mientras se levantaba de su silla, fué hacia ella rápidamente, como si no pudiera esperar más y...la besó.
Un beso que empezó mas que todo como un roce de labios, nada en particular, pero que poco a poco se fue convirtiendo en algo más pasional, ambos cerraron los ojos ante la sensación, Draco tocó los labios de Hermione con su lengua, pidiendo permiso para entrar a su boca, ella le respondió entreabriendo sus labios y soltando un gemido en el instante en que sus lenguas entraron en contacto, empezaron un baile perfectamente sincronizado, como si hubieran estado hechos para eso. Un momento después, las manos de ella se dirigieron hacia el cuello de él y Draco estuvo a punto de perder el control, resistiendo el impulso de dejarse llevar por lo que sentía en ese momento, alguien los podía descubrir. Separó sus labios de los de ella para decir:
-Deberíamos ir a otro lugar...ya sabes…el trabajo de Pociones.
Ella rió y asintió mientras lo besaba.
-Conozco un lugar.-saco su varita e hizo desaparecer sus cosas.-Ven, sígueme.
Salieron de la biblioteca tomados de la mano, rápidamente y viendo a todos lados asegurándose de que nadie los viera, riendo todo el camino. Hermione se detuvo en el séptimo piso, frente a una puerta que él no había visto en su estancia en Hogwarts. Abrió la puerta y entraron a una sala, en el centro de esta había una cama, dos mesitas de noche a cada lado de esta y en la esquina de la habitación, un estante con varios libros de Pociones. Draco no pudo evitar reírse ante ello.
Sintió unas cálidas manos envolviendo su cintura, mientras ella susurraba en su oído:
-Donde nos habíamos quedado, Draco?
Se volteo quedando frente a ella, ambos sonreían, hasta que el reclamó sus labios. Empezaron a besarse con pasión, las manos de ella volaron hasta la corbata de Draco mientras el sonreía y la besaba, empujándola suavemente hacia el centro de la habitación.
Dándole comienzo a la que sería la mejor noche de sus vidas, y a algo más que sucedería a partir del día siguiente.
Quien diría que todo había comenzado con la rebelión de las hormonas y una pequeña sonrisa?

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N/A: Y que les ha parecido? Tenía esto dándome vueltas en la cabeza, me pareció perfecta la pareja de Draco y Hermione (Dramione) ya que a mi opinión su relación amor-odio es totalmente genial! A lo mejor escriba un Harry-Hermione (Harmony) pero NO escribiré un Ron-Hermione (Ronmione) no me gustan para nada...Bueno, espero les haya gustado y dejen su comentario diciendo que les ha parecido. Ahhh que casi se me olvidaba, esto tiene una continuación, algo que en Fanfiction se conoce como "Lemon" es decir, una escena con contenido no apto para menores de 13 años, la subiré en la siguiente actualización, que espero sea pronto, depende de como esté mi inspi, ya que no he escrito mucho para el nuevo capítulo de Las Flores de la Vida (enlace en la columna izquierda).
Créditos de la imagen de este cap a: Kaylann en www.deviantart.com ;)
No olviden de dejar su comentario con su opinión, Gracias.
Besos.
Alissa.
Alissa Hawkind.
A través del mar, del inmenso océano azul, hogar de pequeñas y grandes criaturas.
Criaturas mitológicas que se refugian en sus profundidades, huyendo de las garras de aquellos que, buscando reconocimiento, tratan de robar su hermosura, su libertad, sólo por unas cuantas monedas.
Hermoso océano azul, que con el sonido de sus aguas, lograba calmar al más incalmable. Sanador de heridas, curador de almas…
Océano que ese día, no era hermoso para ninguna de esas dos almas.
Se mostraba tormentoso, sus olas ya no demostraban tranquilidad, demostraban fiereza, su color no era azul, era negro, como la noche inmensa que se cernía en esa ciudad.
Océano, inmenso, y hermoso a la vez tormentoso, refugio de aquellos que escapaban de la tierra, para yacer en sus profundidades. Consuelo de aquellos afligidos que sólo buscaban paz.
Inmenso cielo que se reflejaba en las aguas claras de ese día. La luna, vanidosa luna, miraba su reflejo, se regodeaba de ser la más hermosa criatura de ese cielo.
Más no veía a las estrellas. Aquellos puntitos de luz que iluminaban todo a su alrededor y la hacían ver más hermosa de lo que ya era. Las estrellas amaban a la luna, esa ingrata luna que solo se daba cuenta de la belleza propia y no agradecía a la belleza de aquellas estrellas, que la rodeaban, contemplaban, alababan y exaltaban.
Aquella noche las estrellas, dándose cuenta de la ingratitud de esa hermosa luna, luna a la que amaban por sobre todas las cosas, le pidieron ayuda a sus amigas las nubes. Le pidieron que por favor, las ocultaran, para así darle una lección a tan vanidosa e ingrata Luna.
Las nubes accedieron gustosas al favor pedido por las estrellas, el viento las impulsó y taparon a las estrellas, dejando el cielo de color negro, solo tenuemente iluminado por la débil luz de la luna.
Ella, al ver su reflejo en las aguas, no se vió tan hermosa como siempre, miró a sus alrededores y notó que sus amigas las estrellas, aquellos puntitos de luz que la han acompañado por toda la eternidad, no estaban allí.
Asustada, preguntó a su amigo el viento, sus amigos los árboles, las olas del océano en el que vanidosamente contemplaba su reflejo, mas ninguno le daba respuesta.
Un débil susurro llegó a sus oídos, era su amigo el viento que le decía…
-Por qué tan triste, amiga Luna?-preguntó, susurrando seseantemente.
-Es sólo que…mis amigas estrellas…esos no tan hermosos puntos de luz que exaltaban aún más mi belleza, no están aquí…y no contemplo mi reflejo.
El viento suspiró, haciendo que las copas de los árboles se movieran agitadamente y se formaran algunas olas que distorsionaron el reflejo de aquel inmenso cielo.
-Eres tan vanidosa, amiga Luna.
Con estas últimas palabras, el viento se alejó de su lado. Dejándola más sola de lo que estaba. Varias noches pasaron, los humanos se preguntaban donde estaba la luna.
Ella estaba escondida, no quería salir, sabía que sin sus amigas las estrellas, no valdría la pena que la vieran.
Noches oscuras, sin ninguna luz que iluminara para contemplar la inmensidad del cielo.
El océano extrañaba a la Luna, aquella Luna de la que estaba secretamente enamorado. Todas esas veces que ella se reflejaba en él, la contemplaba, admiraba su belleza, admiraba esos puntos de luz que la acompañaban, y para qué negarlo, sentía envidia de esas estrellas, ya que ellas estaban al lado de la Luna y el no estaba al lado de ella.
El océano fue el consuelo de aquella desconsolada Luna, la acompañaba en esos momentos de amarga soledad.
Una oscura noche, de aquellas que se habían vuelto costumbre para las criaturas terrestres y marinas, el viento miró a la triste luna y compadeciéndose de ella, sopló, alejando a las nubes y dejando al descubierto a las estrellas, que inmediatamente iluminaron el cielo.
Mas no era el brillo acostumbrado, era solo un brillo tenue.
Las estrellas estaban tristes, sentían que la Luna, su Luna, no las valoraba ni las amaba como ellas la amaban a ella.
La luna sonrió, mirando a las estrellas, sus estrellas, preguntándoles.
-Donde habían estado? Las he extrañado.
Una vieja y sabia estrella, que a pesar de sus años, aún seguía brillando intensamente, respondió:
-Cada noche, desde el principio de los tiempos, te hemos acompañado en la inmensidad del firmamento. Tú cada noche te contemplabas en las aguas del océano, contemplando tu belleza, mas nunca nos contemplaste a nosotras. Siendo nosotras, las que te hacemos mas bella de lo que ya eres.
La luna reflexionó sobre esto, dándose cuenta de que esa sabia estrella tenía razón. Les sonrió inmensamente, y les dijo a sus amigas estrellas:
-He aprendido mi lección. Estaba tan enfrascada en mí, que no me daba cuenta que ustedes son las más hermosas. Perdonarían a esta luna y la acompañarían a iluminar la tierra y el océano por el resto de nuestras vidas?
Las estrellas se alegraron y aceptaron en voces altas.
El viento, las nubes y el océano sonrieron, y se alegraron de este hecho. La luna al fin había aprendido que por el hecho de ser pequeñas, no significa que no sean hermosas.
Esa noche el cielo se iluminó como nunca antes, las estrellas y la luna brillaron con todo su esplendor, siendo reflejadas por el hermoso océano, aquel que, gustoso, lo reflejaba, contemplando a la luna y a las estrellas.
Eternamente enamorado de aquella Luna…
Arrancadora de suspiros, inspiración de poetas y regalo de los amantes y enamorados.
Eternamente enamorado de las estrellas…
Hermosas estrellas que hacían hermoso al cielo, que magnificaban la belleza de la Luna…
Su hermosa Luna…
Aquella Luna que se reflejaría en él, en un apasionado beso, por el resto de la eternidad.
Alissa Hawkind.




Holaaa =)
Se supone que esto es un blog personal, más no he puesto nada sobre mí xDDDD
Pero lo voy a hacer en este mismo momento =P
A ver, empecemos...
-Nombre Completo (Muggle xD): Francis Mariño (No pondré mi nombre completo porque es muy largo xDDD!)
-Nombre Mágico xD!: Fran Cullen Black.
-Apodos: Son miles... Mimi(así me dicen en mi casa xD), Fran(así me dicen en el insti y en todos lados xD), Paleta, Paleta de Frsa, Paleta Zombie, De Chocolate, Fresa etc xD!, Alissa ;)
Edad: 17, pronto 18, especificamente el 4 de Octubre (se aceptan regaloooos xD)
*Gustos:
-Musicales: De todo un poco...escucho cualquier cosa, excepto Cumbia, Vallenato y Regaeton (o como sea q se escriba)
-Comidas y Bebidas xD!: Pasticho, Pizza, Comida China, Pollo Frito *baba* Jugo de Naranja *mas baba* Jugo de Fresa *babababa* Jugo de Guayaba...etc xD
-Chicos: (?) JA! eso no lo pondré xD!!
-Literarios: Muchísimos... Me gusta Harry Potter, la saga de Crepúsculo, El Código Da Vinci, La Granja, Angeles y Demonios, 20 Poemas de amor y una canción desesperada, Cien años de soledad,etc etc...

*Miscelánea:
A ver, odio los hospitales y las agujas, les tengo fobia, lo mismo que a las arañas y a las cucarachas *susto*. Detesto decir mentiras, que me mientan y que hagan bromas a mi costa, que me engañen, traicionen, etc...Entre eso, muchas cosas más que de verdad no me gustan...
Entre las cosas que me gustan está los dulces xD!, abrazar y que me abracen, :mmm: xDDD! Entre otros.
Mi familia: Pues...sin comentarios porque orita andamos en unos momentos algo difícilitos..Adoro a mis abuelitas bellas y hermosas *.*, a mi papi, a mi mami y a todita mi family y extraño a mi tío bello que sé que desde allá arriba me observa y me cuida y a mi espectacular tía bella también.

Ahora la parte más importante...Mi Familia Cibernética *.*

Aunque no es mi familia cibernética, porque a pesar de que el mayor contacto que tenemos es por internet, los siento como si en verdad fueran mi family porque los amo como si fueran tales =D!Mis Espectaculares Sobris Anrre, Rossie y Did que los amo con todo mi bello corazón...Mi Arañita Filosofal a la que adoro a pesar de que me quiera comer (?) xDD!...Menxita linda... Super Abe que lo adoro muchíiiisimo *.*...Nuna...Crook que tengo años que no hablo con él pero igualito lo quiero...Lalita linda (mujer, tengo años sin saber de tí)...Manita Josefina (donde te metes?)...Dramiiiii sabes que te quiero =)...Jonathan, super super especial y maravilloso, de verdad que sí, y no digas q no lo eres v_v xD ya sabes que te adoro...
Y a todos toditos todos..Los Aaaaaaaaaaamooooooooo, siempre tendrán un espacio en mi corazoncito =')
Ay ya me puse nostálgica jeje....
Bueno, creo que eso ya es todo xD!...ahí si se les ocurre algo, pueden preguntarme ;)
Besos enormes y Abrazos apaxurradores.
Fran.
Esta imagen fué hecha por Dra..le diré que haga una de todos nosotros *.*
Alissa Hawkind.

-Que pesada la verdad y ligera la mentira.
A pesar de que la estés viendo allí desecha, mirándote con esos ojos que tú tanto amabas, que te llevaban directamente a las puertas de su alma, el alma más pura y hermosa que tu hayas visto jamás.

-Que pesada la verdad y ligera la mentira.
Porque aunque te estés deshaciendo por dentro y tu inexistente corazón se rompiera en pedacitos, tienes que dejarla, te convencías a ti mismo de que era por su bien.

-Que pesada la verdad y ligera la mentira.
Porque aunque tu "familia", principalmente tu "hermana" te rogó despedirse por última vez de ella, fuiste inflexible, dijiste:
"Una ruptura limpia es lo mejor, así a ella no le dolerá tanto" dijiste esas palabras acompañadas de una medio sonrisa, tu mente te decía eso, pero tu corazón, ese corazón que hace mas de 100 años que no latía, sentías como poco a poco se iba rompiendo, rompiendo ante lo inminente que se avecinaba.

-Que pesada la verdad y ligera la mentira.
Y allí estabas frente a ella, viendo como se derrumbaba y caía al suelo después de que tú habías pronunciado la más negra de las blasfemias:
"No te amo".
Allí tu corazón se desgarró completamente, no podías mantenerte en pie, pero tenias que hacerlo, para mantener esa mentira, y la miraste mientras ella te miraba, con las lagrimas bañando su rostro y tu sin poder ir hasta ella y secarlas:
"No me amas?"
"No"
Te miró a los ojos, sabias que ella estaba igual que tu, rota por dentro, callaste a tu corazón diciéndole que era lo mejor para ella, que desde que había estado cerca de ti solo estaba en peligro porque "tú eres el peligro".

-Que pesada la verdad y ligera la mentira.
Ella sacó fuerzas y trato de levantarse del suelo, hipando y con las lágrimas bañando su hermoso rostro de porcelana, pero su torpeza hacia acto de presencia y se tambaleó. No llegando a tocar el suelo porque tú, como acto reflejo y no queriendo que ella se hiciera más daño, mas del que tu le estabas causando, avanzaste y la tomaste entre tus brazos, ella te miró sorprendida y haciendo gestos de soltarla, ella no te dejó, y se agarró con toda su fuerza a las solapas de tu camisa, impidiendo que te alejaras.

-Que pesada la verdad y ligera la mentira.
"Bella" su nombre salió como un susurro de tus labios, y escuchaste como su corazón se aceleraba, adorabas eso.
Pero tu mente volvió a la carga y te volviste a convencer de que ella estaba mejor sin ti, te decías:
"No puedo estar con ella aunque me duela, no puedo ponerla en más peligro"
Pero una vocecita, la voz que suponías era de tu corazón, pero ni siquiera sabias de donde salía ya que tu no tenías corazón... los vampiros no tienen corazón.
"Y ella?, No se supone que la amas?"
"La amo pero..."
"Si la amaras no le causarías este sufrimiento!"
"Es lo mejor para ella"
"MENTIRA!"

El se estremeció y cayó al suelo de rodillas, sollozando con ella en sus brazos y musitando:
"No puedo hacerlo, no puedo, no puedo"
"Edward..."-dijo ella, acariciando con sus manos una de tus mejillas, cerraste tus ojos ante ese cálido contacto, y sentiste como tu corazón se regocijaba tan solo con ese simple gesto.
"Bella..."-dijiste, abriendo tus ojos y encontrándote con el rostro de la mujer más hermosa de este planeta...Bella, Tu Bella.
Ella te regalo una sonrisa y tu miraste esos labios, labios rojos que te llamaban a gritos... no aguantaste y los tomaste, la besaste dulcemente, un beso que transmitía lo que no se podía decir con palabras, pero ella quiso mas y para que negarlo, tu también. Cuando ella entreabrió sus labios, sentiste su cálido aliento, no pudiste resistirte y tu lengua se coló en su boca, creando con sus lenguas una danza en perfecta sincronía. Pero su necesidad de aire hizo que se separaran, ella tomó aire ruidosamente y tu sonreíste, notando como ella te miraba y el rubor subía a sus mejillas.
Se hizo un silencio, roto solamente por el sonido de los pájaros y el latir desaforado del corazón de Bella. Ella te miró y tu le devolviste la mirada, abrió su boca para hablar, pero tu pusiste un blanco dedo sobre sus rojos labios, impidiendo que un sonido saliera de ella, inhalaste aire, aunque no había necesidad de hacerlo, y dijiste:
"Quieres saber el porqué estuve a punto de...dejarte". Ella asintió, mirándote a los ojos.
"Sentía que yo no era lo mejor para ti, que estarías mejor con cualquier otro menos conmigo, cada momento que pasamos juntos representa un peligro para ti... y yo...soy peligroso, Bella, tienes que entenderlo"
"No".-dijo ella, mientras fruncía el entrecejo.
"No que...que no soy peligroso?"-le pregunto mientras la miraba pensativamente, deseando por milésima vez poder leer sus pensamientos.
"Tú me amas, Edward?"-contra preguntó ella.
"Sé que te dije que no te amaba....pero mentí, pronuncie la más negra de las blasfemias al decirte eso. Yo te amo, Isabella Swan"-dijiste mientras acariciabas su mejilla sonriendo, sonrisa que ella devolvió.
"Lo ves? por eso no me harías daño...confío en que no me harás daño…tú me amas"

-Que pesada la verdad y ligera la mentira.
Reflexiono las palabras de su amada y se dio cuenta, la ama y por eso no le haría daño ni dejaría que otros se lo hicieran, porque la amaba.
"Bella..."
"Te Amo Edward Cullen"
Tu corazón salto de alegría al escuchar esas palabras pronunciada por los labios de tu amada y sin poder controlarte volviste a apoderarte de sus labios.
Un beso que empezó como uno dulce, pero que poco a poco se iba saliendo de control, se besaban desesperadamente y siguieron así por unos minutos hasta que una vibración en los pantalones de Edward los saco de su burbuja, con un gruñido, se separo de los labios de Bella pero continuo abrazándola, se llevo una de sus manos hasta su bolsillo, saco el celular y al instante que lo atendió se oyó un grito:
"EDWARD!!!"
"Hola, Alice"
“Ay Edward acabo de tener una visión y estoy tan feliz!"
"Que vistes en tu visión, Alice?"-pregunto.
"Que no dejabas a Bella! Y los vi...."
"Nos vistes como, Alice?"
"Ups! creo que hable mas de la cuenta, nos vemos mañana Edward!"-dijo con su voz cantarina.
"Mañana? porque mañana?"- ya Alice había colgado.
Se guardo el celular con una expresión pensativa en su rostro.
"Quien era, Edward?".-pregunto ella.
"Alice."
"Y que quería?"
No le respondiste, y te levantaste alzándola en brazos, te acercaste rápidamente a su casa y subiste directamente a la habitación de Bella.
"No me has respondido, Edward. Que quería Alice?"
"Solo saber que estaba haciendo"

-Que pesada la verdad y ligera la mentira.
"No es cierto Edward. Te llamó para algo mas..."-dijo mirándolo y con el entrecejo fruncido.
"Eso no importa ya, mi amor. Lo importante es que estamos juntos y que nada ni nadie va a separarnos"
Te fijaste como una sonrisa se extendía por su rostro, miraste de nuevo sus labios rojos y carnosos que volvían a llamarte a gritos y no te hiciste de rogar. La besaste con amor y una pizca de pasión y desenfreno, ella acerco sus manos a tus mejillas y tu las fijaste firmemente en sus caderas, notaste como sus manos bajaron hasta tu cuello y se detenían en los botones de tu camisa, esta vez no la detuviste .Un clic resonó en tu mente y comprendiste las palabras de Alice...Si se verían mañana.

Porque es pesada la verdad y ligera la mentira, al final la verdad sale a flote y la mentira inevitablemente se hunde, dejando al descubierto la verdad. Una verdad que iluminaba, como la luna que cubría con su luz los cuerpos de dos amantes que se entregaban al amor por primera vez.
Descubriendo que la verdad de su amor, superaría todas las barreras.